River atraviesa un momento inesperado en su casa. El equipo de Marcelo Gallardo acumula tres derrotas consecutivas en el estadio Monumental, algo que no sucedía desde hace más de seis años. El golpe es doble: por los resultados y por la sensación de pérdida de fortaleza en un escenario que, históricamente, fue sinónimo de autoridad y victorias.
En Núñez se encendieron las alarmas. La caída ante Palmeiras por la Copa Libertadores (1-2) fue el primer aviso, pero luego llegaron dos tropiezos domésticos —ante Deportivo Riestra (1-2) y Sarmiento de Junín (0-1)— que confirmaron una tendencia preocupante.
La última victoria de River fue el 31 de agosto pasado, cuando venció 2-0 a San Martín de San Juan, por la séptima jornada del Torneo Clausura 2025. Ya pasaron 57 días de aquel triunfo y la cuenta llegará a 63 días (más de dos meses) cuando el Millonario enfrente a Gimnasia de La Plata, por la 14° jornada.
Tres derrotas seguidas en el Monumental y un registro que no se veía desde 2019
Para encontrar una racha similar hay que retroceder hasta enero de 2019, cuando el propio Gallardo vivía una situación parecida tras conquistar la Copa Libertadores en Madrid. En aquel entonces, River cayó de manera consecutiva ante Defensa y Justicia (0-1), Unión (1-2) y Patronato (1-3) en la Superliga 2018/19.
Desde ese episodio, el Millonario no había sufrido tres derrotas seguidas en casa. El Monumental, completamente renovado y convertido en un símbolo de modernidad en el fútbol sudamericano, había sido un bastión casi inexpugnable hasta esta serie negativa.
| Temporada | Rival | Competición | Resultado |
|---|---|---|---|
| 2025 | Palmeiras | Copa Libertadores (cuartos de final, ida) | 1-2 |
| 2025 | Deportivo Riestra | Torneo Clausura | 1-2 |
| 2025 | Sarmiento de Junín | Torneo Clausura | 0-1 |
Un River que perdió solidez y eficacia
Más allá de los números, el equipo muestra síntomas futbolísticos que explican la racha: dificultades para romper defensas cerradas, pérdida de intensidad en el mediocampo y una baja eficacia en la definición. Contra Palmeiras recibió un cachetazo y fue totalmente superado, sobre todo en el primer tiempo. Y en los últimos dos encuentros, River comenzó dominando pero no logró sostener su ritmo, cediendo espacios que los rivales aprovecharon con transiciones rápidas.
El Monumental, donde el Millonario solía imponer condiciones con su juego y la presión del público, se ha vuelto un escenario de frustración. Gallardo, que regresó a River con la misión de recuperar la identidad que lo llevó a la gloria, enfrenta su primer desafío serio desde su vuelta al banco de Núñez.
Lo que viene: Gimnasia, un examen clave en el Monumental
El próximo compromiso será el domingo 2 de noviembre a las 20.30, cuando River reciba a Gimnasia y Esgrima La Plata. El encuentro aparece como una oportunidad inmejorable para cortar la racha y recuperar confianza en el Monumental.
El cuerpo técnico sabe que una nueva caída no solo profundizaría la crisis deportiva, sino que también afectaría el estado anímico del plantel y la relación con los hinchas, que comienzan a impacientarse ante la falta de resultados. El Monumental volverá a hablar. Es hora que los jugadores respondan.
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